Todo el mundo quiere sentir bienestar al estar en su casa, sin importar los años que ésta tenga. Si se trata de un hogar que lleva varias décadas a partir de su construcción, probablemente sea más delicado el tema de realizar una reforma. Pero es evidente que puedes hacerla perfectamente, y sin necesidad de realizar una gran inversión. En la presente entrada de Olmagrowth, te explicaremos cómo reformar una casa antigua sin gastar mucho dinero.
Cualquier reforma sin implicar un gran gasto es posible en Olmagrowth
Te animamos a realizar diferentes tipos de reformas con presupuestos ajustados a tus necesidades. Puedes solicitarnos arreglos parciales o reformas de tipo integral, en baños, cocinas, suelos del hogar o de oficinas, y también instalaciones eléctricas y servicios de pintura.
Es fundamental que tengas un plan de reforma
Si se trata de reformar una casa antigua, la tarea no es fácil.
La realidad es que determinadas cosas podrían llegar a salir mal, y eso podría ocasionar una frustración y una pérdida de tiempo y dinero para el dueño del hogar.
Por lo tanto, te recomendamos encarecidamente que, antes de hacer cualquier cosa, tengas un asesoramiento de profesionales. Es muy necesario conocer todos los pormenores en relación a la rehabilitación de casas antiguas, porque de lo contrario podrían generarse distintos imprevistos y problemas.
Para reformar una vivienda de este tipo, es decir antigua, no hay nada como contar con un equipo que sea experimentado y se dedique 100% a las reformas.
Sólo los profesionales son capaces de tener los conocimientos necesarios para realizar un plan de reforma, que servirá para reorganizar el proyecto en diferentes fases, teniendo una idea clara de qué hay que hacer en cada una de las etapas de la obra de renovación.
En los siguientes párrafos, te ofrecemos los consejos más valiosos a la hora de reformar una casa antigua… ¡y gastando poco dinero!
La planificación tiene que estudiarse con tiempo
Para hacer una reforma sin gastar mucho dinero, es clave la planificación de manera inteligente.
Es la única manera de que puedas minimizar el riesgo de imprevistos y te mantengas siempre dentro del presupuesto. Evidentemente, si has elegido el equipo de trabajo correcto, tendrás parte del trabajo hecho. No solamente podrán aportarte soluciones que no se te habían ocurrido, sino también aconsejarte sobre dónde tienes que poner más atención.
La planificación también incluye una correcta definición de los materiales que van a utilizarse para la reforma. Los profesionales tienen la experiencia necesaria para decidir cuáles son los más materiales más eficientes en relación a los costes y funcionalidad de los mismos.
Debes hacer un análisis intensivo de las estructuras
Podría llegar a ser uno de los problemas más graves a la hora de rehabilitar una casa antigua: el hecho de no consultar a técnicos que tienen la capacidad de valorar cómo se encuentran, por ejemplo, las vigas de madera de la casa.
Sólo después de analizar intensivamente las estructuras, podrás definir si es posible mantener las vigas de madera o si necesitas reforzar el forjado y los muros. También podrás saber con precisión cuáles son las paredes que puedes demoler, y tener claro que no podrás mover muros de carga sin antes colocar nuevas vigas.
La presupuestación del aislamiento también es clave
¿Sabías que querer ahorrar en el aislamiento es uno de los errores más habituales a la hora de reformar casas antiguas?
El hecho de hacer una inversión adecuada en aislamiento podría suponerte un importante ahorro a futuro. Si no la haces, a la larga gastarás mucho más en climatización. Por lo tanto, al hacer una reforma es muy importante invertir en aislamiento térmico y acústico.
Es cierto que las puertas y ventanas pueden significar una parte costosa de la reforma, pero en caso de que no estén en buen estado, te recomendamos sustituirlas.
También es fundamental que escojas materiales que utilicen una tecnología capaz de brindar soluciones. Y si puedes permitírtelo, también evalúa automatizar la climatización, ya que conseguirás mejores resultados.
Controla las instalaciones sin descuidar la revisión de la humedad
Uno de los principales enemigos de una reforma en una casa antigua es su sistema de tuberías. Es muy probable que tenga instalaciones realizadas con materiales que ya no se emplean.
Y ocurre lo mismo con la electricidad. Tienes que revisarla con la máxima exhaustividad, ya que de lo contrario podría ser un gran problema a futuro.
Otro aspecto de vital importancia es que identifiques si existen humedades en paredes o techos, para saber si el problema está relacionado con las tuberías, o si proviene del exterior. Se trata de un trabajo que, aunque parezca superficial, va a ahorrarte mucho dinero en la reforma. Usar una pintura anti humedad, por ejemplo, podría evitar que debas renovar toda la pintura a poco tiempo de haber hecho la reforma.